Cuál es la diferencia entre la anona y la guanábana

Cuando hablamos de frutos exóticos es probable que, en la mayoría de los casos, no conozcamos ni sus nombres ni su forma, color o sabor.

Pero gracias a la difusión global de las economías regionales cada vez podemos acceder a más datos, sean éstos botánicos, nutricionales o comerciales.

Una de las ventajas que trae esta globalización de la información es que crecen la demanda, las exportaciones y la cantidad de beneficiados por sus virtudes para la salud.

Entre las plantas exóticas nos encontramos con las Annonas, que conforman un género (annonaceas) que abarca varias especies de plantas con frutos cuyos parecidos pueden llevar a confusión. ¿Cuál es la diferencia entre la anona y la guanábana?

Una de las especies de la Annona se llama vulgarmente con el mismo nombre que su género: anona, a la vez conocida como anón, saramuyo o riñón.

El nombre botánico de esta fruta es Annona squamosa. De sabor dulce, se puede comer fresca o cocida, además de prepararse jugos, helados y té.

El sitio Tua Saúde asegura que es muy valorada por sus beneficios para la salud: contiene antioxidantes, vitaminas y minerales que aumentan las defensas del sistema inmunológico y regulan la glucosa. Además, fortifica los huesos porque aporta fósforo y calcio y ayuda a mantener en su nivel la presión arterial gracias al potasio y magnesio.

Pero hay otra especie de Annona, la Annona muricata, que se conoce popularmente como guanábana o graviola y que sería como su prima hermana.

Al igual que la llamada comúnmente anona, se consume fresca, en batidos y jugos. Con las hojas se preparan tés y los aceites esenciales de las semillas, que son tóxicos si se ingieren, ayudan a combatir los piojos y liendres.

Este fruto suave y dulce enriquece muchos platos tropicales, pero también se valora como digestivo, sedante, antiinflamatorio, antifebril y antitusivo, según un artículo de la Universidad de Texas en El Paso (UTEP).

Comparte con la anona no solo la familia botánica sino muchas de sus virtudes, como los efectos antioxidantes, anticancerígenos (especialmente contra el cáncer de próstata), anticonvulsivos, antiparasitarios, antipalúdicos y antidiabéticos. La guanábana contiene un aceite esencial que promete tratar las úlceras gástricas.

La Universidad de Texas en El Paso la describe como una fruta comestible deliciosa y nutritiva, pero aconseja evitar la piel y la semilla porque son tóxicas para el consumo humano. Las hojas, que habitualmente se usan para preparar infusiones, no son recomendables durante el embarazo ni para los niños, y tampoco se alienta su consumo en períodos prolongados.

Y, como reduce el nivel de azúcar en sangre, podría parecer bueno para diabéticos, pero quienes sufren esta enfermedad deben consultar con un profesional de la salud antes de consumir esta fruta porque puede potenciar los efectos de la medicación recetada.

Claro que estas recomendaciones no sólo valen para la anona y la guanábana, sino para toda planta considerada medicinal o consumida como suplemento herbario.