Lionel Messi es el gran candidato a ganar el Balón de Oro 2023. Y, por eso, fue uno de los últimos en llegar a la gala que se celebra en el Teatro Le Chatelet, de París. Lo hizo, como siempre, acompañado por su familia. Antonela Roccuzzo, su pareja, lucía un elegante vestido negro que resaltaba su figura.
Pero lo que no se quedaban atrás fueron ThIago, Mateo y Ciro, los tres herederos del crack de Inter Miami, quienes tenían réplicas en miniatura del esmoquin de su papá, aunque sin moño. Y unos lindos detalles en sus peinados. Sí, los chicos tenían cortes especiales con rayas y líneas para convertirse en las sensaciones de la velada.
Apenas llegó, Messi y su familia posaron para las fotos, pero evitaron el contacto con la prensa. Eso sí, el Rey Leo, que llegó un ratito después que David Beckham, su patrón en la MLS, luego cruzó un cálido saludo con Novak Djokovic, el número 1 del tenis mundial, que se acercó a la gala, ya que esta semana participará del Masters 1000 de París.
Quien tampoco faltó fue su guardaespaldas, ese que lo sigue a sol y sombra desde que mudó a los Estados Unidos.
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