Marcelo Gallardo todavía no firmó pero su River empieza a ser bien distinto que el de Martín Demichelis, por lo menos a la hora de abrochar los refuerzos. Ya llegó Germán Pezzella, un campeón del mundo que le da jerarquía a la zaga central, y ahora es un hecho el arribo de Maximiliano Meza, el ex Independiente, proveniente del fútbol mexicano.
El Muñeco firma este lunes y en Núñez se prepara un evento especial, a la espera de la palabra del entrenador ganador de dos Copas Libertadores, que va por más gloria. Eso sí, vale recordar que este domingo el conjunto millonario visita a Unión en Santa Fe y el equipo lo dirigirá Marcelo Escudero, su interino.
El pálido papel de River fuera de casa le costó el puesto a Demichelis pero su equipo terminó la fase de grupos de la Libertadores como mejor primero, mérito que le permitirá definir todas las llaves en el Monumental, escenario donde se jugará la final, a partido único, el 30 de noviembre.
Si se tiene en cuenta que la banda va contra Talleres en octavos y podría enfrentar al ganador de Colo-Colo y Junior en cuartos, es lógico que en Núñez se froten las manos ante la chance de levantar la Quinta, para quedar a una de Boca y a dos de Independiente, los más ganadores del continente.
Meza fue un pedido de Gallardo, que enfrentó y padeció al volante ofensivo surgido en Gimnasia cuando se cruzaron en la Libertadores 2018, aquella de las polémicas en el Monumental contra el Independiente de Ariel Holan, que venía de ser campeón de la Sudamericana 2017 en el Maracaná.
Esa buena temporada en Avellaneda le valió una convocatoria al Mundial de Rusia 2018 para representar a la Selección Argentina, donde tuvo minutos en el encuentro que marcó la eliminación del equipo dirigido por Jorge Sampaoli, ante Francia, en los octavos de final.
Luego llegó el exilio a México para jugar con los Rayados de Monterrey, el equipo más poderoso del fútbol de ese país, que pagó 15 millones de dólares por su transferencia y donde obtuvo cuatro títulos, entre ellos dos Concachampions que le permitieron llegar al Mundial de Clubes.
A pesar de que Boca intentó repatriarlo varias veces y que el Rojo siempre guardó la ilusión de un reencuentro, Meza regresa a la Argentina tras el llamado de River y Gallardo, sumado a una oferta de 2 millones de dólares por su pase, que el club mexicano terminó aceptando porque en seis meses podía irse en forma libre.
Gallardo pidió reforzar tres puestos del equipo: la zaga central, el lateral derecho y un volante mixto que cumpla funciones parecidas a las que realizaba Nicolás de la Cruz, hoy en Flamengo, a quien el club millonario no logró reemplazar.
Con Pezzella confirmado y las negociaciones iniciadas por Gonzalo Montiel, se podría pensar que Meza es el nombre apuntado por Gallardo para esa tercera función. Sin embargo, el correntino de 31 años es más enganche o extremo que un volante con marca, recorrido y llegada. En Independiente jugaba como medio centro ofensivo acompañado de Ezequiel Barco y Martín Benítez, abasteciendo a Emmanuel Gigliotti o el delantero de ocasión.
Por eso, en River siguen trabajando para cumplir los pedidos de Gallardo, que todavía no firmó pero ya empezó ganando.
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